Con el cambio de hora llegó la luz a los caminos y el conejo aprovechó para atracar raudo a los viandantes. Lo confundieron con un banquero y se defendió con un arquero. Era un conejo al parecer romántico, y a una muchacha le dijo te quiero. Al final será verdad eso de que la primavera 🌼 la 🩸 sangre altera, no hay más que ver cómo iba hoy, el hijo de la portera.
No será la primavera pero el cambio de la hora a todo el mundo 🌍 desespera, exaspera y acelera. El ritmo de la vida cambia y la prisa nos embarga. Apenas a las ocho 🕗 y media, el sol cae, se acuesta, es grato sentir como el aire se calienta.
Ya no hay prisa por la cena, ni el descanso se recuerda, queremos calle, pronto, las primeras verbenas…

Hoy me doy un capricho vintage mientras espero las maravillas que portará la primavera.
Debe estar conectado para enviar un comentario.