Hoy casi acabo de morirme del todo.
Y que no piense
nadie que mi muerte es inminente; Por lo menos que yo sepa. Puede que
el evento sea en unos minutos, pero en ese caso, puedo afirmar de
manera rotunda que se trataría de un hecho totalmente inesperado para
cualquiera.
A lo que vamos. Esta misma mañana, como es costumbre, escuchaba la noticias de la tele mientras preparaba mi café.
Hablaban de los
fallos de los errores del sistema judicial. Escuchando el sinfín de
barbaridades enumeradas, sentí vergüenza ajena y también sentí miedo,
mucho miedo. Realmente, comparando nuestro sistema judicial con
cualquier país de los del primer mundo, no hay color, esta mañana he
escuchado episodios del sistema, propios de una república bananera, y
lo digo con todo el respeto, hacia las repúblicas bananeras, claro.
Durante el resto
de la mañana tuve también el gusto-disgusto de escuchar el testimonio
de una trabajadora de la administración ya jubilada, me dejó helada:
"Hace falta
motivación para trabajar. He sido interina y tenía interés en mi
trabajo. Los funcionarios se relajan, se relajan tanto que llegan a
desentenderse de su trabajo"
Lo mejor, la
sinceridad de la señora, lo peor, que eso es algo que està a la vista
de todos y nadie hace nada, ni cuando mandaban unos ni con los otro ni
con los de más atras.
Y esto es un tema que no se puede dejar dilatar ni un milímetro más.
Todos sabemos que
entre todo tipo de delincuentes ya ha corrido la voz de que aquí tienen
un paraiso fiscal para sus actividades, y mientras, nosotros nos
rompemos la cabeza pensando como reformar un código entre la justicia y
la tolerancia. Es que en el fondo, seguimos siendo los mismos de
siempre, cuatro avispadillos que hacen de su vida un agosto y el resto
pringadillos catetillos, que no tontos, pero aunque con muchas
carreras, con mucho miedo en el cuerpo y pocas iniciativas. Aquí sigue
imperiando la comodidad y la pasividad típica del que creció en el
miedo.
Y mientras, entre
unas cosas y otras, nuestras calles se van llenado de porquería y en
las cárceles, dicen que sigue habiendo 2 tipos de presos, como en todo,
los ricos y los pobres. ¡Pues como siempre! ¡Qué ilusos somos aveces!
Esta legislatura tiene que pasar a la historia por algo bueno , grande e importante.
Ya que
económicamente esta cantado de que no tendremos grandes logros _ojalá
me equivocase- y tampoco que nadie piense que dudo de las habilidades
de los que estan en el gobierno, ¡Dios me libre! Pero la verdad, si se
consiguen logros económicos de caracter cercano, por ejemplo:
Equilibrio entre salario mínimo y necesidades básicas, seguro que Dios
tiene mucho que ver con eso.
Entonces,
siguiendo ya con lo que nos ocupa, propongo unas líneas básicas de
apunte para empezar a trabajar en el tema que nos ocupa:
En lo referente al código penal:
– Diferenciar entre delitos económicos, de sangre, sexuales y sobre todo los referentes a la infancia
– Siguiendo con
el hilo de la infancia, REBAJAR la mayoría de edad para juzgar como
adultos, con lo actual y lo anterior, lo único que se consigue es que
cada día se recluten más niños y jóvenes para delinquir, con la
coletilla "a ti no pasa nada" Y al fin y al cabo, todos sabemos, somos
conscientes, que desde el momento en que una persona diferencia entre
lo que está bien y lo que está mal, es culpable de lo que hace.
– Otra perla,
todos los que delincan y no sean de aquí, deportación inmediata, o ¿ Es
que encima de que atentan contra nuestra sociedad los tenemos que
mantener?
– Por duro que
sea, más duros son muchos de los delitos, un si por las penas máximas,
las que ahora no se contemplan. Hay que dejar de ser ilusos, la
mayoría no se rehabilitan, muy al contrario, refuerzan sus tendencias.
– Y para
terminar, a los funcionarios, les vamos a dar 12 puntos, como a
nuestros carnets de conducir, cuando se les terminen, a la puta calle,
ya verás como empiezan a funcionar.
Aunque ellos necesitan más dedicación, un ratito para ellos solos.
Otro día.