Es una pena esta vida en la que el tiempo corre a mil.
Cada vez es más dificil mantener relaciones entre los seres humanos: Vivimos afixiados entre obligaciones, la mayoría completamente inocuas.
De vez en cuando, ralentizamos ese ritmo que nos lleva como un perro con la lengua fuera y pensamos en nosotros mismos pero sin pararnos: Si te bajas, estás muerto.
Aveces un es hasta menos egoista y se interesa por los demás: Entras en los espacios y relees los blogs. Pero nos engañamos, no nos interesa nada más que saber si somos únicos o hay alguien que se encuentra en una situación parecida a la tuya.
Me gustaría entrar y hacer comentarios sobre otros espacios pero soy incapaz de juzgar a nadie.
Quizá soy yo la egoista. Posiblemente. Seguro.
Tienes razón, Manelico.
Pero para mi es solo una cuestión de tiempo.
Un dia de 48 horas me vendría también corto: O haces una cosa, o haces otra. Y siempre hay prioridades. Incluso a uno mismo.
Me cuesta ordenar mis prioridades y esto me ha llevado a convertirme en un autómata.
Quizá por eso, el dia que mi creatividad está a flor de piel, aunque me sienta frustrada por no tener tiempo de desarrollarla, en mi rostro se esboza una sonrisa. En el fondo me siento felíz porque siento que continuo en ebullición, viva.
Últimamente, me encuentro con muchas personas que dicen tener miedo a morirse y curiosamente son personas a las cuales las horas se les hacen largas y los dias interminables. Són protagonistas de un espacio que no tiene nada que ver con este, que se asemeja a uno de esos sitios que aKaban oKupados. ¿A esto se le llama vida? Supongo que si. Una variedad más. Ellos pueden pensar lo mismo de aquellos que somos diferentes.
Por eso leo, pero soy incapaz de comentar una idea ajena, y menos las que exponemos aquí.
Pero a pesar de eso me intereso. No es curiosidad.
Cada vez es más dificil mantener relaciones entre los seres humanos: Vivimos afixiados entre obligaciones, la mayoría completamente inocuas.
De vez en cuando, ralentizamos ese ritmo que nos lleva como un perro con la lengua fuera y pensamos en nosotros mismos pero sin pararnos: Si te bajas, estás muerto.
Aveces un es hasta menos egoista y se interesa por los demás: Entras en los espacios y relees los blogs. Pero nos engañamos, no nos interesa nada más que saber si somos únicos o hay alguien que se encuentra en una situación parecida a la tuya.
Me gustaría entrar y hacer comentarios sobre otros espacios pero soy incapaz de juzgar a nadie.
Quizá soy yo la egoista. Posiblemente. Seguro.
Tienes razón, Manelico.
Pero para mi es solo una cuestión de tiempo.
Un dia de 48 horas me vendría también corto: O haces una cosa, o haces otra. Y siempre hay prioridades. Incluso a uno mismo.
Me cuesta ordenar mis prioridades y esto me ha llevado a convertirme en un autómata.
Quizá por eso, el dia que mi creatividad está a flor de piel, aunque me sienta frustrada por no tener tiempo de desarrollarla, en mi rostro se esboza una sonrisa. En el fondo me siento felíz porque siento que continuo en ebullición, viva.
Últimamente, me encuentro con muchas personas que dicen tener miedo a morirse y curiosamente son personas a las cuales las horas se les hacen largas y los dias interminables. Són protagonistas de un espacio que no tiene nada que ver con este, que se asemeja a uno de esos sitios que aKaban oKupados. ¿A esto se le llama vida? Supongo que si. Una variedad más. Ellos pueden pensar lo mismo de aquellos que somos diferentes.
Por eso leo, pero soy incapaz de comentar una idea ajena, y menos las que exponemos aquí.
Pero a pesar de eso me intereso. No es curiosidad.