Dudas razonables para 12
años, 11 meses y 18 días.
A veces, en casa no vemos
la tele a la hora de comer.
A veces, a modo de
antaño, conversamos entre bocado y bocado e incluso olvidamos aquello de que
con la boca llena no se habla.
Y hoy, como día en que de
manera ocasional hemos recuperado el modo antaño, mi hijo de 12 años, 11 meses
y 18 días, ha dado la salida a una batería de preguntas, a las que hemos intentado
responder no con todos los conocimientos del mundo y tampoco con toda la ética,
por lo que al final, nuestras respuestas han sido nuevas preguntas, y lo que
podía haber sido una conversación histórico-social, acabó convertida en un
debate casi filosófico, de estos de ensayo de a pie que a me gustan, pero sin
conseguir una respuesta.
Todo empezó con el
comentario de una noticia en el periódico del día de ayer, en la que hablaban
sobre Evo Morales y su política de renacimiento de la cultura indígena.
Yo lo interpreto como una
treta populista, nada más… y nada menos.
María lo vio como un
posible encuentro de la felicidad para los indígenas, algo así como el refrán
de “Ojos que no ven”.
El comentario del niño, fue
la pregunta que nos en paro técnico: “¿Es que la sociedad europea es la mejor? Ya no preguntó por la española, observé en su
respuesta-pregunta, que aunque la noticia iba de zonas reducidas, no estábamos
platicando de la crónica social de ninguna parte.
La cuestión era grande, estábamos
cuestionando, en nuestra humilde mesa de camilla, la veracidad de las
civilizaciones. Ojo!, a todo esto
añadimos, que con un niño de 12 años, 11 meses y 18 días
Yo le respondí: “Hijo, te voy a decir una cosa, algo muy malo
debe tener nuestra civilización occidental. Entre tanto, pienso “Supongo que nos pasa como
aquella cita del Nuevo Testamento, que decía “Como puedes ver la paja en el ojo
ajeno y no ves la viga en el propio?”
Te digo eso, porque si
nuestra civilización fuese tan perfecta, ninguna otra civilización o cultura,
que de una forma u otra la ha conocido, no volvería a la suya. Quizás aquí tenemos una
respuesta sobre este caso del Sr. Morales (aunque no la creo, pero le doy la
opción, le creo todavía más duda, para que no juzgue ni califique a la ligera)
Le bombardeo con más
preguntas y más información,
–
“La cultura árabe
en los 70 estaba muy europeizada y… de repente han retrocedido a sus costumbres”
–
Aquí mismo,
también hay quien quiere recuperar un mapa de la península ibérica de hace 600
años.
–
Las novelas
como “El código da Vinci”, y la inserción vaticana en el tema, que no ha hecho
más que desigualar la balanza en detrimento de las conjeturas, podrían estar
dando luces o palos de ciego, sobre verdades o mentiras. Y la duda que se hace en las personas al
pensar que todos sus valores, entre ellos la verdad, están basados en la mayor
mentira de todos los tiempos…
El niño me para en seco y
me dice:
“Pero mama, no me
enrolles con el Da Vinci, que ese era un inventor”
“Un visionario, un artista,
como yo”, le interrumpe Maria
El niño continúa:
“Pero y si hablamos de
los países de norte de Europa, esos dicen que tienen la mejor educación del
mundo”
“Y también donde la gente
se suicida más”, vuelve a interrumpir María.
¿Y yo a quién contesto? ¿A quien le diré lo que parezca menos mal?
Les salí con una auténtica
parida:
“A los nórdicos no los podéis
incluir, son diferentes, no tienen sol”
Y me fui a trabajar.