Encontrándonos en el epicentro de la era de las Redes Sociales, paradójicamente estamos perdiendo las habilidades sociales por completo.
Debo puntualizar, aunque seguramente ha quedado completamente cristalino, que al referirme a las redes sociales me estoy refiriendo a todas aquellas ubicadas en la madre de todas las redes, la red madre y cuna, Internet.
Cada día nos movemos con más desenvoltura dentro del espacio “Punto” y prácticamente con esa misma facilidad que ganamos aptitud para ellas, la perdemos a gran velocidad en el espacio físico.
Hay quienes han perdido la total capacidad de relacionarse con sus semejantes fuera de la atmósfera virtual: Entran en un lugar con la idea de preguntar o informarse sobre algo y lo que consiguen es poco más que agredir al informador.
Aveces, de manera inconsciente intentan recuperar los modos que un día aprendieron, pero muchos de ellos no los conocieron.